Hoy quiero dedicar este poema a una persona... que aun sin tenerlo tan cerca, estuvo... sin ser tan cariñoso, dio tranquilidad a mi alma... el se ha ido.... a los ochenta años de edad, después de haber vivido... lo que quiso vivir... para mi abuelo...
Muy cerca de mi ocaso yo te bendigo vida,
por que nunca me diste esperanza fallida ni trabajos injustos ni pena inmerecida.
Por que veo al final de mi rudo camino que yo fui el arquitecto
de mi propio destino.
Que si extraje la miel o la hiel de las cosas
fue por que en ellas puse hiel o mieles sabrosas.
Cuando plante rosales coseche siempre rosas.
Cierto, a mis lozanías va aseguir el invierno
Mas tu nunca me dijiste que mayo fuera eterno.
Halle sin duda largas las noches de mis penas.
mas no me prometiste tu siempre noches buenas,
y en cambio tuve algunas santamente serenas.
Ame, fui amado, el sol acaricio mi faz.
Vida, nada me debes...
Vida, estamos en paz.
AMADO NERVO.
miércoles, marzo 26, 2008
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6 comentarios:
Es bellísimo y emocionante.
Te mando un abrazo fuerte.
Definitivamente bello. Debes estar orgullosa de reconocer lo que tu abuelito fue y significó para ti, al igual que en vida, posiblemente no lo veas pero a tu lado estará para protegerte.
Besos y saludos
Aracangel miron y Cariñosita:
gracias por sus comentarios en verdad el fue un hombre ... especial.
Un gran abrazo a las dos...
Hermoso homenaje con este poema para tu abuelo.
Besos.
TE JURO QUE ME ENCANTARÍA TENER UN ABUELO ASÍ, IGUAL QUE EL TUYO. LA VIDA NO ME LO REGALÓ, NI MOOS!!!
YO PIENSO SER UNA ABULITA A TODO DAR.
BESITOS
Que lindo!
yo tambien tengo un abuelo adorado!!!
abrazos,
Toni
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